El Refugio - Tiedra

Fuimos llevados a este restaurante por un amigo cercano de la atadara, que organizó las visitas y por supuesto la comida en este restaurante con terraza muy cerca del centro de interpretación "tiedra de Lavanda". en el paso también nos contó un poco sobre la historia de los locales, ya que conoce a los dueños del local. con el que caía 40o no estaba planeado comer en la terraza. El restaurante también sirve cenas de fin de semana, pero no tiene servicio de café o bar el lugar fue completamente y nos hizo esperar un poco, pero valió la pena. Estábamos muy satisfechos con la atención, el servicio y la calidad de la comida. el dueño nos tenía bien obsesionar con una botella de vino esperando por él, que agradezco de aquí en nombre de todos. Pedimos el menú del fin de semana, que consistía en tres entradas de degustación para compartir, y los segundos para elegir. todo muy bien presentado. café y postres en la misma línea. la relación de precio y calidad muy equilibrada. muy ricos licores de sabor lavanda son altamente recomendados y me encantará volver.

Hoy hemos estado comiendo alli. Todo EXQUISITO. Hay un menú con tres primeros para compartir a modo degustación y luego cada uno elige un segundo (dentro de una gran variedad). Llevábamos dos niñas a las que desde el primer momento les dieron prioridad y les hicieron un menú a su gusto. Después la carta de postres, no sabias cual elegir, si uno tenía buena pinta, otro más.... y para terminar.... la atención de 11 sobre 10. Sin duda volveremos porque además la relación calidad-precio..... insuperable

El local amplio luminoso y cómodo. La atención es profesional y rápido. El menu tiene propuestas interesantes y variadas. Los platos son abundantes pero aún así te ofrecen repetir. Es recomendable hacer reserva siempre.

Sitio muy acogedor. Un trato excelente y una comida muy muy rica, los postres caseros insuperables. Ideal para ir con niños, fácil acceso y buen aparcamiento.

Restaurante con muy buena calidad de género. Todo muy sabroso. Solo tienen menú. Nos ofrecieron repetir en el segundo plato. Postres caseros, os recomiendo tarta de queso y el arroz con leche. Imprescindible reservar, nos atendieron sin reserva pero no lo hacen. Muy amables.