El Peruano Del Sur

Es un restaurante escondido muy cerca de la catedral que tiene buena imagen pero lo excelente es la comida. Los tipos de arroz son deliciosos y el aguacate relleno es verdaderamente delicioso.La atención de meseros excelente y acepta todas las tarjetas de crédito.

This is not a good place to eat, regardless if you fancy Peruvian food. Pisco sour is not close to the original. Service is lousy. Plates are scarcely served while the price does not correlate with with quantity or quality.

Mi papá tenia ganas de comer comida peruana, era el restaurante más cercano; por lo tanto, no sabíamos qué esperar.Pedimos ceviches, tiraditos, tacu tacu y platillos típicos peruanos.El ceviche estuvo excelente, sin embargo la porción era pequeña y la leche de tigre extra se cobra aparte.Todo lo demás que comí no tenia sabor.Mi hermanita de cinco años pidió por iniciativa propia un salero para su comida. Me parece que la relación calidad-precio no se cumple. Está caro y no ofrecen ni un lugar bonito, ni una comida rica.

Fui a comer a este lugar y me encanto el cebiche que aquí sirven, así como la cerveza, en general los platillos son buenos y el cebiche tiene ese sabor que deja ese recuerdo en el paladar, y si lo acompañas con una cerveza es mucho mejorLa música regular pues creo que el que canta no tenia idea de lo que interpretaba

Nos encanta probar siempre nuevos lugares para comer, y siempre que pasábamos frente a este restaurant nos daba curiosidad. El fatídico día que decidimos entrar, no obtuvimos buena información sobre el contenido de los platillos. Todavía no hemos estado en Perú, pero estoy seguro que los chicharrones fritos, diminutos y duros que probamos no reflejan para nada la gastronomía de ese país. Solo con un par de cervezas y la entrada que consistió en esos chicharrones de mariscos, que parecían sacados de una charola de mariscos congelados viejos y duros, nos gastamos una fortuna. Cuando reclamamos por el tamaño y la calidad de la comida, primero el mesero, y luego el gerente, nos aseguraron con muy malos modos, que así era la comida peruana. Decidimos cancelar el resto de la comida y salir huyendo de allí. Aparte de la pésima calidad, elevados precios y mal trato, el lugar está super kitchs, abarrotado de figuritas navideñas, renos, rompecabezas, jarrones de cerámica,etc, etc, lo que hace que te sientas más que en un restaurant, en una mercería de colonia popular donde puedes encontrar cualquier cantidad de chucherias. En suma, NO se te ocurra ir aquí, está horrible!