Merendero Las Lupitas - Coyoacán

La atención es amable, es un restorán familiar, informal, el lugar está decorado de una manera acogedora, creativa y mexicana. Los alimentos son la mayoría muy buenos, algunos son de hecho deliciosos, pero hay que saber qué pedir. Las sopas están mal hechas, lo demás está muy bien, mexicano tradicional y especialmente sano. Los postres son deliciosos y el café de olla también. Falta que se preocupen en detalles respecto a la atención y a la estética de los platos, espero lo logren porque urge que se preocupen de estos detalles.

Es un restaurante muy ameno. El personal que atiende es muy servicial y atento. La decoración es típica del lugar y la comida fue muy rica. Vale la pena visitarlo

Hacia como 25 años que no venia, mantiene el mismo ambiente y decoracion. trato sencillo y amable y una inesperada sorpresa: el panucho de cochinita pibil!!

Este lugar para ir a merendar es particularmente recomendable. Después de ser cliente por mas de 35 años, puedo asegurar que se ha conservado la tradición del servicio, ambiente, limpieza, precios razonables y sabrosas alternativas a elegir. Tampoco me he enfermado del estómago por asistir.En un ambiente colonial, rústico coyoacanense, rodeado de hipsters, hippies y gente normal podrá disfrutar de su menú único de comida norteña.Se puede estacionar en Francisco Sosa, en la callecita de lado o bien en la de atrás.El menudo es muy bueno, las chivichangas, y las empanadas santa Rita de queso acompañadas de un platito de frijoles maneados. También hay combos para los nuevos visitantes para probar algunas de sus especialidades.Originalmente no había saleros tradicionales, sino casuelitas con sal la cual se servía pellizcando una porción. Ahora con la ley actual ya no hay sal en la mesa y viendo en retrospectiva esa práctica, que bueno que ya no, puesto que no sabemos a ciencia cierta donde anduvieron esos dedos.Finalmente el atole de canela, con su respectiva coyota es lo obligado.

Tienen muy buena comida con el sazón típico de México, lo único es que se demoran un poco en servir.