A Pousada, Taperia - Ribadumia

Ayer cenamos y nos encantaron todas las tapas que pedimos. El postre estuvo un poco justo, pero en general la experiencia fue muy buena y la relación calidad-precio nos pareció excelente. Además, el lugar tiene mucho encanto.

He puesto agosto como fecha, pero podría hacerlo en cualquier otro mes y año. Es raro que pase más de un mes sin visitar este local al que llevo muchos años yendo con frecuencia. ¿Y por qué? Si buscas un tapeo rápido, tradicional, en un lugar acogedor y a un precio más que asequible para todos los bolsillos… es muy difícil encontrar un lugar que supere A Pousada. Es un local acogedor, restaurado y con un gran jardín donde se puede comer, aunque en la zona exterior han ido añadiendo espacios reservados y cubiertos. Ofrecen tortillas de varios tipos, poco hechas, como nos gustan, una variedad de croquetas, y las poupetas (fingers), ideales para niños y no tan niños. Sin duda, una excelente opción para ir con cualquier tipo de público. Como detalle, la ubicación está incorrecta. Esta tapería se encuentra en O Rosal.

Comida deliciosa, tratamiento inmejorable. El arroz con zamburiñas y gambas es uno de los mejores que he probado, la tortilla es excelente, especialmente la de chorizo, y las poupetas también están riquísimas. ¡Los precios son fantásticos! Además, el lugar tiene un encanto que invita a quedarse solo con mirarlo. Un sitio precioso. Volveremos más veces sin dudarlo.

Nos pusieron una ensalada ya aliñada con medio litro de vinagre y cuatro gotas de aceite la cual valia 6.5 euros y llevaba medio tomate tres tacos de queso cuatro mazorquitas de maiz media cebolla y un huevo, la cual no pudimos comer y nos cobraron igual, el servicio pésimo, el encargado por llamarlo de alguna manera, se rio cuando al preguntarnos que tal la comida le dijimos que la ensalada no se podía comer. El arroz de zamburiñas y langostinos gambones y de los baratos) llevaría hecho 3 dias. Sitio bonito pero cocina y gerencia pésima.

Fuimos porque nos recomendaron las carrilleras que hacían en ese sitio pero, primera desilusión, no había. En su lugar nos recomendaron el arroz y aceptamos. Completamos el pedido con alguna otra cosa. El resumen es que las zamburiñas estaban muy secas, las patatas fritas que acompañaban a la zorza con exceso de sal, las poupetas que son los clásicos fingers de pollo estaban bien. El comentario final lo dejo para la recomendación, un arroz pasadísimo de tal manera que de la bola que formaba se quedaba pegado al cubierto. Vino el cocinero a preguntar qué tal estaba todo y cuando se lo dijimos símplemente dijo: “¿Sí?” y ya está, ni disculpas ni oferta de cambiarlo y por supuesto apareció en la cuenta. Sitio para no volver