Images
ContributeFeedback
Contribute Feedback What User likes about Gambrinus Haus Braveri:
Lugar de paso, en la entrada de La Cumbrecita. Nos atendieron bien, y lo que pedimos para merendar fue rico. Nos quedamos leyendo un rato, descansando de caminar, y no tuvimos ningún problema. View all feedback.
What User doesn't like about Gambrinus Haus Braveri:
Ubicado sobre la peatonal del pueblo, recibe al visitante contando la historia de Gambrinus, el rey del Peñon del Aguila.El menu que ofrece es sensillo pero rica: pizzas, panchos, gaseosas.Un lugar recomendado para visitar con niños. View all feedback.
Local ubicado en la entrada principal, con una construccion tipica centroeuropea de madera y piedra. Muy buena vista desde las...More
La atención es lenta (muy lenta) pero son amables. La comida es normal pero si ya estás en el parque no te vas a ir. Los precios son un poco altos para lo que ofrecen.La vista es espectacular!
Resto pequeño, bien ubicado, ni bien se ingresa a este pequeño poblado. El Menu el bien acotado: sandwiches, pizzas y panchos -con salchicha alemana-. Comimos los sandwiches y las pizzas, y estaban bien. Las cervezas en lata, tipo artesanal, son buenas. Los precios no son excesivos. Si bien no es un lugar que recordare por el resto de mi vida, para un almuerzo liviano y seguir, cumple sobradamente. Lo recomiendo.
La atención durante las actividades (tirolesa y arborismo) fue IMPECABLE. El mal servicio lo recibimos en el restaurant Gambrinus. Eramos un grupo de 10 personas que habíamos hecho la reserva y el pago hacía una semana.Nos dijeron que nuestro almuerzo (la misma entrada y el mismo menú estándar para todos) estaría listo a las 13.30. A esa hora estuvimos todos en la mesa, sólo nos trajeron las bebidas, y a las 14.30 cuando pedimos pan, grisines o algo porque teníamos hambre, no lo trajeron. Recién a las 14.45 trajeron 9 de las 10 entradas (2 empanadas para cada uno), el último plato hubo que pedirlo. Reclamamos varias veces a la moza y a la encargada y la respuesta siempre era la misma. "ya sale". A las 15.15 trajeron sólo dos platos y a las 15.30 los ocho platos restantes. Exactamente dos horas después de la hora estipulada (por ellos). Y todos fríos. El postre también estaba pagado pero decidimos irnos porque ya habíamos esperado demasiado. En ningún momento la encargada se acercó a pedirnos disculpas o a ofrecernos alguna solución o compensación por el tiempo perdido. Había otras mesas que también tuvieron más de una hora de demora. Deberían advertir a los clientes que llegan en el momento que hay una demora de dos horas, así al menos pueden elegir si quedarse a esperar o irse, para así poder darle prioridad a los grupos que reservaron y pagaron previamente.
Lugar de paso, en la entrada de La Cumbrecita. Nos atendieron bien, y lo que pedimos para merendar fue rico. Nos quedamos leyendo un rato, descansando de caminar, y no tuvimos ningún problema.