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Contribute FeedbackLas tapas frias no son para nada recomendables, la ensaladilla que me sirvieron a mí el día que se elaborá posiblemente estuviera buena, pero al cabo de los días era incomible. El servicio también deja mucho que desear. Nada recomendable.
El servicio fue pésimo, ¡peor imposible! Los camareros, un hombre y una mujer, discutiendo delante de los clientes. ¡Qué horror, pensé que se iban a tirar del pelo! Había solo 5 mesas ocupadas y aún así tardaron mucho en atenderme. Para colmo, estaba sentada dentro del local, pero me tomaron nota desde lejos, el camarero ni siquiera se acercó a la mesa. Me sirvieron el desayuno con la mesa sucia y al limpiarla, no tuvieron cuidado y me echaron los restos de migas de pan encima. El zumo de naranja y la tostada estaban sabrosos, pero me cobraron 3,30€.
Establecimiento correcto en general, sobre la lentitud del servicio nada que destacar máxime cuando fue visitado en plenas fiestas de Colombianas, implementado con personal joven solventando en parte esa carencia. Destacar la terraza agradable más tranquila que la zona de la avenida de la Ría. Carta amplia sin florituras, con precios contenidos (se anexa ticket , exquisita la ensaladilla de gambas (tapa 3 € y los refrescos servidos en embases de mayor cantidad que en otros sitios (1,80€ . Correcta la media de chocos y los fingers de pollo acompañado con patatas fritas con corte singular que llaman y atraen más su degustación. Por mejorar el precio montadito lomo con queso, pequeño y caro.
Tardaron unos 15 minutos en tomarnos nota, aunque el verdadero problema fue en que luego tardaron otra 1 hora en traernos la comida. Desde luego mejor no tener prisa y la comida no nos gustó demasiado. Por cierto la terraza estaba a medias, por lo que no se entiende está demora
Estuvimos esperando por más de media hora para un plato que finalmente no nos gustó. La camarera estaba algo despistada y notamos una mala relación entre los empleados. No volveremos a repetir.