Casual - Ciutadella de Menorca

Encontramos este restaurante en Google con buenas críticas, así que decidimos reservar y cenar después de haber visto la puesta de sol en el puente de Gil (muy recomendado). Tuvimos suerte de haber reservado un par de días antes ya que si lo intentas el mismo día generalmente está completo. Después de preguntar por las recomendaciones, decidimos por gyozas de calamar y pimienta roja, una increíble almohadilla thai (quizás lo que más nos gustó), el cangrejo de chile suave, el pastel de atún y como postre el pastel de queso con fresas. Tienen una carta no muy extensa pero más que suficiente. Algo a destacar es la amabilidad con la que nos trataron en todo momento, con una sonrisa, y el chef (Daniel) que salió a ver cómo estaba todo. El local está muy cuidado en todos los detalles, incluso el baño. Sin duda, es un lugar bueno y muy recomendable. Algo que me llamó la atención fue que solo admiten un número limitado de comensales para poder dar una atención adecuada, ya que solo dos personas se encargan de todo. Estaremos seguros en nuestra próxima visita a Menorca.

Recomiendo este lugar en Menorca para probar algo diferente y más moderno. El almohadilla thai es sin duda lo mejor, ¡muy bueno! Los nachos con totopos caseros son deliciosos, al igual que los garbanzos tostados que les dan un toque muy bueno. Las gyozas con una salsa picante son buenísimas, y las croquetas son muy sabrosas aunque les faltó un poco de cremosidad. También quiero destacar la atención, ¡un 10/10! Sarina y el resto del personal son super amigables. El lugar es amplio, con una terraza muy agradable, y nos decoramos por solo 4€.

Sitio super recomendado. Es muy top! La atención de Sabrina y Dani es excelente y que decir de la comida casera y deliciosa... Es muy cuidada, se nota que lo hacen con cariño. Repito varias veces al año y siempre es un acierto.

La terraza es cálida y acogedora, con un amplio espacio entre mesas que hace que el restaurante sea muy cómodo y tranquilo. La atención y la comida están cuidadas al detalle, mimando al cliente por encima del volumen del negocio. La comida y el postre son deliciosos. ¡Volvería sin duda!

Amabilidad y cercanía desde el momento en que fuimos a reservar. el trato es espectacular, y la comida con mucha explosión de sabores. gyozas y nachos riquisimos. el almohadilla es increíble. y los postres. ¡Riquísimos tb! un énfasis: aparte de la comida, que es importante, el tratamiento cercano y amistoso, la manera de hablar con los clientes y sonreír todo el tiempo. vale la pena. Creo que es de los lugares donde más gusto, he sentido parte de cenar. si vienes a un menor. debe visitar