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Contribute FeedbackHemos parado a comer algo. Al entrar, saludé a la camarera, quien me miró pero no me contestó. Después le pregunté si podíamos picar algo en la terraza y me dijo que no. Le mencioné que íbamos con una perrita y me respondió "Sí, claro... pero no". Con solo 3 personas dentro comiendo, prefirió que nos fuéramos en lugar de permitirnos comer en la terraza o dentro con la perra, que es muy buena y nos dejan entrarla prácticamente en todas partes.
Volviendo del Valle de Arán a Barcelona, paramos a comer en este restaurante de carretera. Comimos muy bien. Artículo de calidad muy bien hecho y con un servicio muy amable.
Excelente servicio y deliciosos platos de verduras a la plancha y carne a la parrilla. Recomiendo probar el ternasco de cordero. Las porciones son abundantes.
Restaurante ubicado junto a la carretera en una esquina, con un enorme estacionamiento y muchas personas. El menú cuesta 18€: la ensalada de la casa es abundante pero en realidad es la ensalada de abajo la que le da volumen. La comida es aceptable; el amable jefe no se toma el tiempo para explicar los platos cuyas palabras en español no entendemos. En la cuenta, nos dimos cuenta de que nos había cobrado 60 céntimos de más durante la transacción con nuestra tarjeta de crédito en comparación con la nota.
Nos cobraron 10 euros por dos cafés, dos tostadas de pan de pagés (una con tomate y aceite y otra con tomate y queso) y una botella de agua grande.