Pozoleria Blanquita - Xochimilco

Decía Bob Ross, no hay errores, solo accidentes felices. Y encontrar este restaurant, es precisamente este tipo de evento.La tarde se había echado a perder gracias a un bloqueo que nos impedía avanzar, así que buscamos un lugar para estacionarnos y esperar a que se despejara el paso.Las horas transcurrieron y la tarde se hizo noche entre vehículos atorados, conductores malhumorados y entre este ambiente se comenzó a colar el aroma inconfundible de pozole recién hecho.Inicialmente nos resistimos, pues estábamos a menos de un kilómetro de llegar a nuestro destino pero luego de estar más de cuatro horas en espera a avanzar en el tráfico, pues...El pozole "chico", es la versión grande de cualquier otro restauran de comida mexicana, la carne perfectamente cocida, sin "gordos", el maíz suave pero con consistencia, el caldo sazonado como si lo hubiera preparado "abuelita", solo pudo mejorar con los rábanos, lechuga, orégano, cebolla, y demás complementos. Ah!! no olvidemos una salsa que terminó de aderezar este manjar mexicano. Las tostadas de pata de res igualmente bien cocinadas, aderezadas y acompañadas con su crema, queso y asentadas sobre una tostada de maíz que conservó su firmeza desde la primer y hasta la última mordida.Sea por que se quedaron atorados al entrar a Xochimilco, o simplemente por que quieren probar uno de los mejores pozoles del centro de México, visiten "Pozolería Blanquita"