Los Tilos - Moya

Fuimos a comer muy temprano y el restaurante estaba vacío. El camarero era muy agradable. Pedimos pan con alioli y sin alioli (caliente y bueno) garbanzada (un ojo que es un plato muy abundante. cremoso, sabroso y muy bueno,) costilla de cerdo con salsa de miel y patatas arrugadas ( carne tierna y con una salsa muy buena) el mojo de picon era muy bueno. frasco de huevo (casero,) tarta de zanahoria (bueno dulce y jugoso)

Muy recomendable. La comida exquisita, desde los judiones, gofio escaldado, la carne, los quesos... Probamos gran variedad de platos y estaba todo muy bueno. El trato también excelente. El restaurante se encuentra en un sitio precioso con un caminito que viene muy bien para bajar la comilona.

Restaurante de comida tradicional Española y Canaria. Las raciones muy abundantes, calidad de comoda alta a precios buenos y trato del personal estupendo. Recomendadísimo el solomillo de carne y wl gofio cocido.

Hoy almorzamos por primera vez en este restaurante después de una agradable caminata por Los Tilos. La comida muy buena, desde la garbanzada, que estaba espectacular, pasando por las carnes a la brasa hasta llegar a los exquisitos postres; mención especial merece el flan de calabaza con helado de gofio, en el punto justo de dulzor para ser muy bueno sin resultar empalagoso. El pan de la casa también estaba delicioso. El personal nos dio muy buena atención con un trato muy amable en todo momento. La única pega que le pondría es que, al cocinar con brasa y no haber mucha ventilación (al menos hoy), el olor dejaba el ambiente muy cargado y la ropa se quedaba impregnada de olor a brasa. Pero es algo que tendría fácil solución: mosquiteras y ventanas abiertas, porque eso sí, ventanas hay bastantes. De no ser por esto, el ambiente es acogedor y, sin duda, por su comida y por el trato del personal, lo recomiendo.

Restaurante totalmente recomendable, tanto por sus exquisitos platos como por el trato recibido por parte del personal local. Pedimos como entrada un pan de pueblo y queso tierno para acompañar el potaje de berros, una sopa tradicional, y finalmente algunos judías. Todo delicioso.